Poner suficiente agua con sal y un poquito de aceite a hervir para hacer la pasta y cocinarla según las instrucciones que trae.

Tomar el trozo de salmón, quiterle la piel y cortarlo en pedazos no muy grandes, no muy pequeños. Dejar a un lado.

Derretir la mantequilla en una sartén, agregando el aceite de oliva y la cebolla picada menudita, dejando que se cristalice esta. Añadir la leche, el caldo Rico desmenuzado y la harina revolviendo muy bien para que no se formen grumos, Agregar el vino blanco y el queso crema. Puede llegar a cortarse, de ahi la importancia de revolver muy bien (yo lo hago con el whisk, que me ayuda a no formar grumos!!!). Agregar el salmon a la salsa,  a punto de servirlo, para que no se seque. Debe quedar una salsa suelta no gruesa.

Servir la salsa encima de los vermicelli, acompañado de queso parmesano.