No se cómo esta el clima en las otras ciudades del país pero lo que es en Bogotá, ya empezó la temporada de frío y lluvias. Esto me hizo pensar que el post de este mes lo debía dedicar a algo que nos encanta para estas noches y es tomarnos una deliciosa sopa bien caliente y luego a la cama a ver una buena película o serie de tv.
Decidí tomar unas sopas clásicas que siempre son bien recibidas por todos. Para empezar tenemos una deliciosa Sopa Minestrone que es una especialidad de la cocina italiana y que consiste en una sopa elaborada con las verduras de la temporada (las mas comunes son judías (frijoles), cebollas, apio, zanahorias y tomates todos picados finamente), algo de pasta corta o arroz siendo totalmente vegetariana o se le puede añadir pollo, carne, tocino, etc... No hay una receta única pues depende del sitio donde se haga y de la receta de la abuela...
Luego tomamos la tradicional Sopa de Cebolla cuya receta se remonta a la época medieval francesa y era considerado un plato humilde elaborado con ingredientes sencillos y que se identificaba con las épocas de hambruna. Es un caldo en el que el principal ingrediente son las cebollas caramelizadas. La manera francesa es una vez servida la sopa en los platos hondos, se coloca una rebanada de pan blanco sobre la que se espolvorea queso rallado, y se gratina en el horno para formar una costra dorada.
Y por último decidí incluir la favorita de mi casa: la Crema de Ahuyama o Zapallo. Desde que mis hijas eran pequeñas esta sopa o crema ha sido la preferida. Con muy pocos ingredientes y muy económicos se crea una crema super especial. Si se le añade una pizca de Nuez Moscada se le da un toque diferente.
Los acompañamientos... pan francés con mantequilla, queso crema o Pesto. O unas deliciosas tostaditas o palitos o papitas en fósforo que encontré en las #TiendasD1.
Espero les guste el plan para estas noches frías y lluviosas!!!
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